martes, 24 de febrero de 2015

Plantillas para Deportistas



Plantillas Personalizadas para Deportistas 



Cuando practicamos deportes es muy importante tener en cuenta el cuidado de los pies para evitar lesiones y problemas de salud. Las plantillas deportivas cumplen varias funciones importantes como dar estabilidad al pie y proporcionar un mayor equilibrio que va a influir no sólo en nuestras piernas sino también, en las caderas y espalda.



Aunque se ha puesto muy de moda el barefoot running (correr descalzo),  muchas veces requerimos un apoyo extra para no dañar las articulaciones y prevenir lesiones. Las plantillas personalizadas no son un elemento obligado para la práctica de deportes, sin embargo, por su adaptación anatómica al pie mejoran la estabilidad postural de equilibrio durante la marcha al ofrecer apoyo a toda la superficie plantar y distribuir el peso corporal equitativamente sobre toda la planta del pie, reduciendo tanto el impacto del pie sobre el terreno como las vibraciones que afectan a las articulaciones, mejorando así el rendimiento durante la práctica del deporte y alargando la vida deportiva del individuo.


Curiosidades de los pies



Datos Curiosos Sobre los Pies
 
Los pies son una parte muy importante de nuestro cuerpo y no siempre le damos los cuidados y la atención que estos requieren. A continuación, compartimos algunas curiosidades que nos ayudaran a entender mejor la importancia de cuidar nuestros pies. 
  • Los pies son la construcción mecánica más compleja del cuerpo humano. Cuentan con el 25% de los huesos del cuerpo humano; cada uno de ellos posee con un conjunto de 26 huesos, 33 articulaciones, más de cientos de ligamentos, tendones y numerosísimas terminaciones nerviosas.  
  • Morfológicamente se puede distinguir tres tipos de pies – según  la forma y tamaño de los dedos del pie.
    • Pie griego – el segundo dedo del pie es más largo que el dedo pulgar del pie.
    • Pie egipcio – el segundo dedo del pie es más corto que el dedo pulgar del pie.
    • Pie polinesio o cuadrado – todos los dedos del pie tienen la misma longitud.

  • Cada pie es único, dos personas no tienen los mismos pies, ni siquiera los dos pies de la misma persona son idénticos.
  • Las huellas de cada persona son singulares e independientes y permanecen así el resto de su vida.
  • Hay aproximadamente 250.000 glándulas sudoríparas en un par de pies.
  • Las glándulas sudoríparas de nuestros pies producen en promedio entre 1 litro y 1 1/2 litros de transpiración por día.
  • Se recomienda caminar 10.000 pasos por día; eso equivale entre 7 y 8 kilómetros al día; es decir que deberíamos  pasear entre 2.500 y 3.000  kilómetros al año.
  • Por cada paso que damos al caminar se ejerce una presión de hasta tres veces el peso corporal de la persona sobre el pie. Al correr o brincar está presión aumenta hasta más de 7 u 8 veces el peso corporal.
  • El tamaño de los pies cambia 10 % durante el día, lo que es equivalente a un número de talla de calzado. Por lo que el momento del día más apropiado para ir a comprar zapatos es durante la tarde, porque los pies están más hinchados.
  • Los pies de la gente delgada se hacen más largos durante el día y los pies de la gente demasiado pesada se hacen más amplios.
  • Los pies de niños crecen continuamente y deben ser medidos cada tres meses.
  • Los pies de las mujeres crecen hasta los 14 años de edad y los de hombres hasta los 16 años de edad.
  • 9 de cada 10 mujeres usan zapatos demasiado pequeños para ellas.
  • Las mujeres experimentan problemas en los pies cuatro veces más que los hombres.
  • Los pies de las mujeres son el doble de delicados que los de los hombres, pero son el triple de resistentes que los de él, debido a que ella realiza muchas más actividades.
  • Durante el periodo de vida en una persona, la planta de los pies se dobla, se extiende  y se contrae 300 millones de veces y aún permanece totalmente funcional.
Cuidar de la salud de nuestros pies es fundamental.  Usando zapatos cómodos, adecuados y con plantillas personalizadas adaptadas para nuestros pies (hechas  individualmente para proteger nuestros pies según el pie y la pisada de cada persona) mejoramos nuestra calidad de vida.

Pies de los Bebés



PIES DE LOS BEBÉS




Los pies son la construcción mecánica más compleja del cuerpo humano. Cada uno de ellos cuenta con un conjunto de 26 huesos, 33 articulaciones, más de cientos de ligamentos, tendones y innumerable terminaciones nerviosas.


Los pies de los bebés están formados casi completamente por cartílagos, la misma sustancia flexible que forma nuestras orejas y nariz y que se calcificarán durante los primeros años de vida. Por ser tan blandos, los pies de los bebés necesitan calcetines y zapatos suaves, porque un calzado rígido o apretado podría causar deformaciones.


Se estima que solo un 40% de la población adulta adquiere un patrón de marcha correcto, debido a errores en la elección de los zapatos durante la infancia. Un correcto desarrollo motor de pies y piernas se adquiere caminando mucho y sobre diferentes superficies: arena, grama, terrenos irregulares, cuestas, etc.


Todos los bebés tienen los pies planos hasta los 3-4 años debido al tejido adiposo que se encuentra en el arco plantar. Muchas de las anomalías de pies y piernas son temporales en los bebés, e irán desapareciendo gradualmente.


El ritmo de crecimiento de los pies en los niños es muy rápido. Hay que cerciorarse que la talla del calzado es el adecuado, medirlos a menudo y cambiar zapatos frecuentemente.

No se debe traspasar los zapatos de un hermano a otro, pues los pies son anatómicamente diferentes y cada niño tiene diferentes puntos de apoyo y una forma distinta de andar, por lo que los zapatos pueden deformarse. Caminar con unos zapatos heredados puede resultar molesto y provocar heridas que impidan el correcto desarrollo de pie del niño.


Los pies de los niños suelen sudar más que los de los adultos. Por eso es necesario que los zapatos estén hechos de materiales naturales y transpirables, y que los niños tengan más pares para cambiarlos  con frecuencia.

lunes, 23 de febrero de 2015

Los pies... cimientos del cuerpo



Los Pies… Bases de Sustentación del Cuerpo


Nuestros pies no son solo el fin de nuestros miembros inferiores, son la base de sustentación del cuerpo, dan apoyo a todo nuestro organismo y de ellos nos valemos para desplazarnos. Cualquier alteración anatómica o fisiológica en ellos, o una insuficiente absorción de los impactos sobre su planta puede afectar otras estructuras del cuerpo. Gran parte de las lesiones de pie, tobillo, rodilla, cadera y columna vertebral están directamente relacionadas con la manera de pisar. Se estima que siete de cada diez personas padecen una patología relacionada con los pies, lo que puede reflejarse desde malestares al andar hasta problemas que afectan al sistema musculo-esquelético. 

Los pies y la forma de pisar determinan nuestra postura corporal. Es decir, sí pisamos defectuosamente a causa de cualquier elemento como puede ser tener pies talo-valgos (asociado a pies planos), equino-varos (asociado a pies cavo), dismetría de los miembros inferiores, etc. o al usar calzados inadecuados como los de puntas agudas y/o con tacones mayores a 4 cm nuestras articulaciones (tobillo, rodilla, cadera y columna vertebral) tomarán posiciones diferentes para reacomodar este desequilibrio producido en los pies. Adicionalmente a las alteraciones anatómicos y fisiológicos que resisten nuestros pies y articulaciones hay que sumarle que en el momento de caminar, el pie golpea el suelo con hasta tres veces su peso corporal y al correr se eleva hasta siete u ocho veces su peso corporal. ¡Esto es un gran impacto para que absorban nuestras articulaciones!

Nuestros pies proporcionan equilibrio. En cada paso que damos se activan nuestros propioceptores y dan aviso de la superficie que estamos pisando y nuestro cuerpo se reacomoda para ejecutar el movimiento óptimo para seguir avanzando o estar de pie. Cuando nuestro cuerpo intenta nivelarse y toma otra postura involucra músculos que pueden terminar contracturándose por cumplir funciones para los cuales no fueron preparados. Muchas veces una contractura en la espalda se debe a problemáticas en los pies. La falta de musculatura en los pies de personas de edad avanzada o por el uso excesivo de calzados nocivos (puntas agudas y tacones), proporcionan problemas de equilibrio porque ya los propioceptores no censan como deben o mandan señales pero los músculos son incapaces de responder a tiempo por carencia de tonicidad. Esto también puede ocurrir en personas que llevan una vida sedentaria y en la cual sus pies no se enfrentan con desafíos para fortalecerse. 



En la actualidad contamos con el análisis baropodométrico, que no es más que un estudio digital de la pisada y de la marcha en la cual se mide la presión que ejerce el peso del cuerpo sobre la superficie plantar en el momento de estar de pie y al andar. En base a este estudio se confeccionan plantillas ortopédicas personalizadas, únicas según las necesidades de cada individuo, hecha con un material suave y flexibles llamado "plastazote" que se adaptan anatómicamente al pie. Se aconseja emplear un calzado neutro de punta redonda o cuadrada y con un tacón de máximo 2 cm con las plantillas ortopédicas personalizadas que equilibrarán la posición del pie y el resto del cuerpo y neutralizarán los movimientos de rotación excesiva y los impactos del peso corporal al caminar o correr.
 

Las ventajas de las plantillas hechas según las necesidades de cada individuo son:

  • Reducen la tensión anómala en los ligamentos o compresión de los cartílagos de las articulaciones.
  • Previenen artrosis, tendinitis y problemas de tobillo, rodilla, cadera o columna.
  • Evitan sufrir de lesiones como esguinces.
  • Las plantillas puede transferirse de un par de zapato a otro, y debería usarse todo el tiempo cuando la persona está de pie o caminando. 
Es importante destacar que la pisada no es igual en el pie izquierdo y el derecho, mucho menos existe una pisada “estándar” entre dos o más personas. El uso de estas plantillas genéricas puede ser contraproducente porque no ofrecen la estabilidad ni el soporte que cada individuo requiere.




Nuestro pies muchas veces son pasados por alto y no le damos importancia, y es que los tenemos tan olvidados y muy pocos se dan cuenta de que son fundamentales en nuestra salud, y necesarios cotidianamente. Una mala pisada puede provocar dolores de talones y espalda (especialmente a nivel lumbar), pero también puede provocar otros tipos de patologías importantes y de más difícil asociación. Los pies son a la vez un pilar básico en nuestro equilibrio y una mala alineación de los mismos puede afectar a una mayor pérdida del mismo y precipitar caídas o alteraciones relevantes. Otras articulaciones que se pueden afectar en mayor grado son las rodillas y caderas, no quizás hoy, pero sí cuando se produzca un envejecimiento. Es preferible evitar males corporales mayores previniendo y cuidando de nuestros pies y nuestra pisada desde temprana edad para poder llegar a adultos mayores en mejores condiciones. Los pies son el primer punto de apoyo contra el suelo, de cómo se realice la pisada dependerá la gravedad de los males que podamos padecer.